
EDOMEX.- En un acto de profunda sensibilidad y compromiso social, la LXII Legislatura del Estado de México se ha convertido en aliada de los seres más vulnerables: los animales. En el marco del Día Mundial del Perro, diputadas y diputados de distintas bancadas, junto a la gobernadora Delfina Gómez Álvarez, han dado un paso trascendental al presentar una serie de iniciativas para transformar el trato que la sociedad y el Estado dan a los animales, elevando a rango constitucional la prohibición de su maltrato y colocando en el centro de la agenda pública el respeto a la vida y dignidad de los seres sintientes.
Más que una reforma legal, se trata de un acto de justicia y humanidad. Entre las propuestas se encuentra la creación de una Fiscalía especializada, un registro de personas agresoras, la regulación de clínicas veterinarias y comercios, así como el innovador programa “Mascota de barrio”, que impulsa el cuidado colectivo de los animales en situación de calle. Estas acciones responden a una realidad alarmante: más de 3.5 millones de perros en el Estado de México sobreviven en condiciones de abandono y maltrato, expuestos al hambre, la violencia y enfermedades, afectando también la salud pública.
Los rostros detrás de estas iniciativas comparten un objetivo común: crear un entorno donde el respeto por la vida animal sea una responsabilidad compartida. Desde Morena, el diputado Gerardo Pliego apuesta por un modelo de cuidado animal basado en valores; desde el PVEM, el legislador Héctor García impulsa medidas que garanticen condiciones dignas para su venta y tenencia; mientras que el PAN y MC proponen servicios veterinarios gratuitos, atención especializada y regulación a quienes interactúan con animales de terapia o servicio. Cada voz suma en esta sinfonía legislativa por la protección animal.
La gobernadora Delfina Gómez ha llevado este compromiso aún más lejos al proponer penas de hasta 12 años de prisión para quienes lucren con el sufrimiento de perros y gatos, y hasta seis años para quienes causen su muerte sin justificación. Su iniciativa también contempla sancionar con severidad a quienes inflijan dolor o actos de violencia sexual contra los animales. Estas medidas no solo buscan castigar, sino disuadir, prevenir y educar a una sociedad que está llamada a evolucionar hacia el respeto a toda forma de vida.
Con la reciente aprobación unánime de la reforma constitucional contra el maltrato animal, el Congreso mexiquense manda un mensaje claro: el bienestar de los animales no es un tema menor, es reflejo de los valores de una sociedad que se quiere justa, empática y civilizada. Este momento marca un antes y un después. Es la oportunidad de construir un Estado donde cada ladrido, cada aullido, cada mirada silenciosa de un animal encuentre eco en leyes firmes, corazones abiertos y manos dispuestas a cuidar.